Vuelos baratos desde Bilbao (BIO) a Lyon (LYS)

VUELIVO es un comparador de vuelos que analiza en tiempo real las tarifas disponibles entre Bilbao y Lyon. Nuestra tecnología revisa cientos de páginas a la vez, permitiendo encontrar las ofertas más baratas y actuales para viajar desde Bilbao a Lyon sin perder tiempo.

Así, en lugar de mirar una web tras otra, centralizamos la información y mostramos las tarifas más económicas y horarios en un solo lugar. Con esto, nuestros usuarios pueden descubrir rápidamente vuelo barato Bilbao a Lyon y elegir con calma, ahorrando dinero y esfuerzo.

Una ruta de vuelo desde el Aeropuerto de Bilbao (BIO) hasta el Aeropuerto de Lyon Saint-Exupéry (LYS) dura aproximadamente 1 hora y 25 minutos.

Considerando los resultados de búsqueda, la época ideal para volar de Bilbao a Lyon es la primavera y el verano, ya que el buen tiempo y la actividad de la ciudad atraen a más viajeros y se encuentran vuelos con buena relación precio–asientos; a este periodo le siguen mayo y junio, cuando la demanda crece pero aún es posible encontrar ofertas atractivas y horarios cómodos para recorrer la ciudad.

En cambio, para quien quiera evitar aglomeraciones y gastar menos, conviene mirar noviembre, diciembre y enero, cuando la demanda baja y suelen aparecer tarifas más bajas y menos multitudes en la ruta Bilbao–Lyon, ideal para viajes tranquilos y presupuestos ajustados.

La ruta entre Bilbao y Lyon sin escalas no es frecuente, ya que la mayoría de vuelos directos entre estas dos ciudades se realizan a través de aeropuertos europeos con una o dos paradas para ajustar horarios y capacidad. Las aerolíneas que más suelen operar en este tramo son Vueling, Air France y Iberia, que ofrecen horarios variados y plazas suficientes, especialmente en temporada alta, permitiendo elegir entre diferentes horarios y precios para viajar con comodidad.

Si no hay ruta directa, las opciones con escalas suelen ser las más habituales y, en muchos casos, también las más económicas, con conexiones en hubs como Madrid o Barcelona o incluso en ciudades europeas cercanas, lo que facilita encontrar vuelos compatibles con tus fechas y presupuesto; en cualquier caso, conviene consultar varias combinaciones de aerolíneas para maximizar la fiabilidad, comodidad y ahorro.

Para volar de Bilbao a Lyon, lo recomendable es prever una estancia de entre 3 y 5 días. Así podrás recorrer el vibrante casco antiguo y la basílica Notre-Dame de Fourvière, saborear la gastronomía regional en bouchons y disfrutar de un paseo relajante por el Parc de la Tête d’Or. Si te apetece más ritmo, añade un día extra para una escapada cercana a Alps o explorar el museo de Confluencia y sus zonas de tiendas y cafeterías junto al Sillon.

Para un viaje corto desde Bilbao a Lyon, lo ideal es quedarse 2 o 3 días para ver lo esencial: el Vieux Lyon, la Prairie de la Croix-Rousse y la Place Bellecour. Con 4 días ya puedes dedicar una mañana a una ruta por Fourvière y otra a probar la gastronomía de la región, más una tarde para conocer tiendas y rincones del Barrio de Presqu’île. Una estancia de 5 días te permitirá equilibrar visitas culturales, parques y momentos de relax saboreando un crème brûlée o un bocadillo lyonnais en un café con encanto.

Si quieres encontrar un vuelo Bilbao a Lyon a buen precio, lo más razonable es reservar con una antelación de 6 a 8 semanas. Esto te permitirá acceder a más horarios y tarifas asequibles antes de que suban, además de ganar tranquilidad ante posibles cambios. Las cifras señalan que, para asegurar tarifas bajas y evitar sorpresas, conviene confirmar la reserva con unas 7 semanas de antelación respecto a la salida.

Además, si quieres ahorrar aún más, intenta planear tu viaje entre semana y evita períodos de alta demanda como fines de semana largos o festivos. En general, reservar con 6 a 8 semanas de antelación ofrece un buen equilibrio entre elección de horarios y precio, permitiéndote disfrutar de un ahorro notable frente a la compra de última hora.

• Vieux Lyon y traboules: paseo por las callejuelas empedradas del casco antiguo, con fachadas coloridas y la historia de la ciudad a cada paso; las traboules secretas permiten vislumbrar antiguas galerías y patios, una experiencia que combina leyendas medievales con plazas acogedoras para detenerse a tomar un chocolate caliente.
• Basílica de Notre-Dame de Fourvière: mirador emblemático de Lyon desde donde se contemplan vistas panorámicas de la confluencia de los ríos Saône y Rhône; su interior dorado y la historia bohemia de la ciudad invitan a una mini ruta de ascenso en funicular o a pie, para superar el cansancio con recompensas visuales.
• Boulevard de Paul Bocuse y la gastronomía regional: recorrido por los mercados y restaurantes que celebran la cocina brasserie y la tradición bouchon; prueba platos icónicos como la quenelle de lucioperca, el analítico jété de Lyon y los dulces tradicionales, acompañados de vinos locales en un ambiente cálido y familiar.
• Parc de la Tête d’Or: gran pulmón verde con lago, zoológico y jardines; ideal para pícnics, paseos en bici y descubrir su invernadero con orquídeas y plantas tropicales, perfecto para familias que viajan desde Bilbao y buscan calma entre monumentos.